Las arterias coronarias son arterias pequeñas que nacen de la aorta y se ramifican a su vez en arterias más pequeñas que suministran oxígeno y sangre al corazón.
Si las arterias coronarias son sanas, cuando el cuerpo pide más oxígeno debido a una mayor actividad física, el suministro de oxígeno puede aumentar rápidamente.
Si, por el contrario, el corazón y todo el cuerpo están dañados por la aterosclerosis, corren riesgos muy graves.