En esta categoría, la grasa se deposita sobre todo en caderas, glúteos, muslos y piernas (circunferencia de la cadera).
En la obesidad ginoide la grasa está presente sobre todo a nivel subcutáneo.
Esta distribución de la grasa puede conllevar trastornos de la circulación venosa, osteoartritis, trastornos de menstruación y embarazos difíciles.
Tras la menopausia puede resultar más difícil distinguir si la obesidad es de tipo androide o ginoide, puesto que en las mujeres con adiposidad ginoide la grasa puede acumularse también en el abdomen.