El fósforo se encuentra en muchos tipos de alimentos, como los productos lácteos, la carne y las aves de corral, el pescado, los huevos, los frutos secos, las legumbres, las verduras y los cereales. La tasa de absorción del fósforo contenido de forma natural en los alimentos es del 40%-70%; el fósforo de origen animal tiene una tasa de absorción mayor que el fósforo de origen vegetal. Aunque, el calcio contenido en los alimentos y suplementos puede unirse a parte del fósforo de los alimentos e impedir su absorción.
Algunos productos lácteos, verduras, frutas y cereales son ricos en fósforo. También algunas carnes, mariscos, pescados, frutos secos y semillas son ricas en fósforo o son buenas fuentes de minerales, mientras que otros tipos de carne, pescado y legumbres contienen fósforo, aunque en menor cantidad.
Siguiendo una alimentación saludable, se pueden mantener niveles equilibrados de fósforo y de la mayoría de los electrolitos.