La hipercalcemia es una afección médica en la que los niveles de calcio en la sangre son elevados. La causa más común de la hipercalcemia es el aumento de la producción de parathormona (una hormona producida por las paratiroides, cuatro pequeñas glándulas que rodean la glándula tiroides). Esto provoca un aumento de la absorción de calcio en el sistema digestivo, una disminución de la eliminación de calcio con la orina y un aumento de la reabsorción de calcio de los huesos. La hipercalcemia también puede deberse a una ingesta excesiva de calcio, a una ingesta excesiva de vitamina D, a enfermedades óseas o a tumores (pueden producir una gran cantidad de una proteína como la parathormona que aumenta el nivel de calcio en la sangre). En los casos de hipercalcemia leve, muchos pacientes no suelen presentar síntomas. Los primeros síntomas de la hipercalcemia pueden ser estreñimiento, náuseas, vómitos, dolor abdominal y pérdida de apetito. Pueden excretarse grandes cantidades de orina, lo que puede provocar deshidratacióny aumento de la sed. Si la hipercalcemia dura mucho tiempo o es grave, pueden formarse piedras renales que contengan calcio. En los casos más graves (aparición aguda), puede haber desde fatiga, labilidad emocional (cambios rápidos e intensos en las emociones), confusión o estupor (escasa reacción incluso a estímulos vigorosos) hasta consecuencias mucho más graves.