La piel es el revestimiento externo del cuerpo humano y uno de sus órganos más grandes en cuanto a superficie.

Puede ser vellosa o sin vello (glabra); la piel humana está cubierta casi por completo de folículos pilosos, aunque a veces el vello es poco visible.

Su espesor es variable, según las diferentes partes del cuerpo, y también cambia entre hombres y mujeres. Al mismo tiempo, el espesor de la piel cambia considerablemente en las diversas etapas de la vida; los niños pequeños y ancianos tienen la piel más fina que los adolescentes y adultos.

La piel tiene una estructura compleja (enlace a 18) y cumple funciones (enlace a 17) importantes para el organismo.