La obstrucción mamaria es el aumento de la presión dentro de la glándula mamaria y de su volumen.
La obstrucción puede estar causada por el retraso del comienzo de la lactancia materna, por una succión ineficaz, por un tiempo demasiado alto entre las tomas, por una producción repentina y abundante de leche, etc.
La mejor solución es hacer que el niño succione con frecuencia. En el caso de succión ineficaz, se puede vaciar el seno con un extractor de leche eléctrico o manual.
También es útil realizar masajes circulares en la espalda de la madre, a los lados de la columna vertebral.
Para evitar la obstrucción es mejor vaciar el seno con el extractor de leche cuando no se puede realizar la lactancia materna de forma regular y el intervalo entre las tomas aumenta.
La leche se puede conservar en el congelador y utilizarla cuando sea necesario.