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Gingivitis
Gingivitis
La gingivitis es una inflamación que afecta a la parte de color rosa de la encía que rodea el diente.
Este tejido adquiere gradualmente un color rojo intenso y tiende a sangrar cuando se toca, incluso con el cepillo de dientes.
Se trata de una inflamación del tejido gingival normal sin presencia de bolsas periodontales.
Las causas de la gingivitis
La causa principal de esta enfermedad es la placa bacteriana que se puede formar bajo la encía incluso debido a una higiene oral incorrecta.
La cavidad oral está llena de bacterias; microorganismos que se nutren de los restos de los alimentos que no se eliminan correctamente después de comer.
Cuanto mayor sea la cantidad de restos que se dejan en la boca, mayor será el número de bacterias presentes en ella.
Cuando la cantidad de estos microorganismos es tan alta que no puede controlarse, nuestras defensas inmunitarias desencadenan una inflamación que provoca el engrosamiento y el enrojecimiento de los tejidos.
Algunas condiciones de la vida, enfermedades o costumbres son factores de riesgo que favorecen la aparición de la gingivitis.
Los síntomas de la gingivitis
Los síntomas propios de la gingivitis son: inflamación y enrojecimiento de la encía, sangrado después de comer o de cepillarse los dientes, halitosis (mal aliento).
La intensidad de los síntomas puede variar, y la gingivitis simple por lo general no es dolorosa.
Factores de riesgo que favorecen la gingivitis
Entre las condiciones de vida, enfermedades o hábitos que favorecen la gingivitis se encuentran: la diabetes, el embarazo, la pubertad, un cepillado de los dientes demasiado fuerte, el tabaquismo,, los aparatos de ortodoncia, las enfermedades que debilitan el sistema inmunitario, algunos fármacos y factores genéticos.
Cómo prevenir la gingivitis
Para prevenir la gingivitis, se pueden adoptar algunos comportamientos, como:
- Practicar una buena higiene oral: cepillarse los dientes después de comer o incluso picotear, usando hilo dental para eliminar los restos de alimentos que hayan quedado atrapados entre los dientes.
- Visitar regularmente al dentista: ir al dentista por lo menos una vez al año. Si se tienen factores de riesgo que favorecen el desarrollo de la gingivitis es conveniente realizar controles más frecuentes.
- Seguir un estilo alimentario .
La gingivitis en los niños
Los niños tienen menos placa bacteriana y su reacción frente a ella es menor con respecto a los adultos, por lo que la gingivitis es poco frecuente antes de la pubertad.
Las variaciones hormonales que se producen durante la pubertad representan un factor de riesgo (enlace a 11) para el desarrollo de la gingivitis.
La causa principal de la gingivitis en la infancia es la mala higiene oral.
Pueden favorecer el desarrollo de gingivitis en el niño
- Aparatos de ortodoncia o el apiñamiento dental
- Respirar siempre por la boca
- La erupción dental (puede provocar la inflamación y el enrojecimiento de las encías)
- La malnutrición, las infecciones virales, el estrés o la carencia crónica de sueño
Información
¿Qué es la placa bacteriana?
La placa bacteriana está formada por una aglomeración de gérmenes que se adhieren a la superficie del diente.
Provocan daños al diente y a los tejidos que lo rodean.
La placa que se forma en la superficie del diente por fuera del margen de la encía provoca caries dentales, y la que se forma bajo la encía causa gingivitis, periodontitis y abscesos periodontales.
¿Qué son las bolsas periodontales?
La inflamación y la hinchazón de la encía provocadas por la placa bacteriana y el tártaro conllevan el aumento del espacio entre el diente y la encía (surco gingival), un canal estrecho con una profundidad de 1-3 cm a los lados del diente.
Cuando este espacio se ahonda, se forma la bolsa periodontal, dentro de la cual se puede formar una mayor cantidad de placa y tártaro, los cuales, a su vez, la hacen más profunda.
Las bacterias que se anidan en las bolsas periodontales producen sustancias tóxicas que destruyen las células que reproducen el hueso.
¿Cómo se cura la gingivitis?
El primer tratamiento para curar esta enfermedad se basa en una higiene oral correcta, que puede mejorarse en las fases agudas mediante el uso combinado de cepillo, hilo interdental, enjuague antibacteriano y gel.
El dentista, por su parte, podrá intervenir eliminando los depósitos de tártaro o reduciendo las posibles partes desbordantes de prótesis dentales que pueden favorecer la acumulación de alimentos y tártaro.
Si se trata de forma adecuada, la gingivitis retrocede espontáneamente sin dejar daños residuales.
